Paella Va, el take away de paellas que se lanza a la franquicia
Paella Va apuesta por la franquicia para llevar su concepto desde el corazón arrocero de Valencia a todo el territorio nacional.
La paella es, sin duda alguna, el plato insignia de la gastronomía española. Protagonista de toda una región, se trata de una de las receta más populares de nuestro país, la cual ha conseguido llevar la riqueza culinaria española más allá de nuestras fronteras.
En 2017, Marcos y Kiko decidieron unir las principales tendencias del mercado culinario actual; el buen comer –con el arroz como plato principal–, y el take away o delivery. Así nació Paella Va, natural de Gandía, una marca enfocada 100% al delivery de uno de los platos más aclamados de nuestro país.
El éxito de una paella depende de la calidad de los ingredientes y en Paella Va cuidan al detalle este aspecto, priorizando la materia prima para que el sabor del producto sea excelente. De ahí su rotundo éxito entre el público, quiénes según informan sus fundadores, siempre repiten. Así, el concepto Paella Va consiste en ofrecer la mejor experiencia de comida a domicilio. El cliente tiene a su disposición una gran variedad de irresistibles paellas, arroces y fideúas elaboradas al momento, las cuales pueden solicitar en línea o a través de la app, listas para el servicio de recogida o delivery.
Apuesta por la franquicia
“Desde que inauguramos nuestro local enfocado al delivery en Gandía con un plato tan conocido como la paella no hemos parado de crecer”, apunta Marcos Córdoba, cofundador de la marca. Ahora apuestan por su expansión a través del sistema de franquicia para llevar su concepto desde el corazón arrocero de Valencia a todo el territorio nacional. Para ello, trabajarán de la mano de la consultora especializada en crecimiento empresarial T4 Franquicias.
Paella Va ofrece un modelo de gestión sencilla con altos márgenes de beneficio. “Hemos sido capaces de ofrecer el mejor producto sin la necesidad de costes de estructura elevados. A partir de una inversión moderada y una cocina de 140 metros cuadrados el emprendedor puede formar parte de una franquicia muy rentable, con un concepto original y el total soporte por parte de la central”, afirma Marcos.
Uno de los aspectos más destacados de este modelo de negocio es la simplicidad de su concepto. Invirtiendo la mitad de lo que costaría una arrocería tradicional, un franquiciado puede lograr beneficios superiores a los de un restaurante de éxito gracias a la simplicidad de la gestión. Asimismo, destaca la eficiente selección y entrega del producto. Amplios márgenes logrados gracias a la exhaustiva selección de proveedores y a la ajustada estructura de costes que la marca ha desarrollado.